La experiencia de Berlage se basa en la aplicación de una ley general, la holandesa de 1901 que distingue claramente las diversas escalas del proyecto: plan general, plan parcial, proyecto arquitectónico. Los trabajos urbanísticos de Berlage pertenecen a la administración normal de diversas ciudades holandesas y tienen un eco inmediato donde quiera que sean aplicables métodos administrativos análogos, como en Alemania.